Enfermedades del corazón: El extracto de semilla de uva contiene proantocianidinas que fortalecen los vasos sanguíneos, estabilizan el colágeno y la elastina, y mantienen la integridad del tejido conectivo, ayudando a proteger órganos, articulaciones y músculos.
Hemorroides: Su efecto fortalecedor sobre los vasos sanguíneos puede prevenir y tratar las hemorroides y la insuficiencia venosa crónica, una condición en la que las venas debilitadas causan varices, arañas vasculares y llagas en las piernas.
Colesterol: Aunque no se detalla en el texto original, el aceite de semilla de uva también puede ayudar a mantener niveles saludables de colesterol.
Cáncer: El resveratrol, un polifenol en el extracto, puede inhibir el crecimiento y la división de células cancerosas, y bloquear enzimas que prolongan la vida de algunas células cancerosas.
Fibromialgia: Con su poder antioxidante, el extracto de semilla de uva puede reducir el daño asociado con la fibromialgia, protegiendo las células musculares del estrés oxidativo.
Endometriosis: El extracto puede aliviar el dolor y la inflamación causados por la endometriosis al bloquear la liberación de prostaglandinas, y sus propiedades antioxidantes protegen las células del daño de los radicales libres, incluso en el cerebro.
Enfermedades de la piel: Ayuda a mantener la salud de la piel al proteger el colágeno, la elastina y el ácido hialurónico, siendo útil en el tratamiento de psoriasis y eczema. Sus flavonoides también pueden reducir las reacciones alérgicas.
Síntomas de alergia: Como antihistamínico natural, puede controlar estornudos, congestión y otros síntomas alérgicos.
Crecimiento del cabello: Puede contrarrestar la dihidrotestosterona (DHT), promoviendo el crecimiento de cabello sano.